Los Angelic Upstarts se formaron en la primavera de 1977 en la localidad costera de South Shields, en el noreste de Inglaterra. No la original, pero casi, la primera formación clásica de la banda constaba de Mensi a las voces, Raymond “Mond” Cowie a la guitarra, Steve Forsten al bajo y Decca Wade a la batería. Todos los miembros de los Upstarts venían de familias de clase trabajadora. Mensi era minero, Decca curraba en los astilleros, Forsten era paleta y Mond electricista. Mensi por aquellos años no estaba muy interesado por la música que digamos ya que su verdadera pasión era seguir a su equipo del alma, el AFC Sunderland. Grupos de glam rock como Slade, Gary Glitter o David Bowie eran los que Mensi solía escuchar antes de caer rendido al punk. La decisión de comenzar con el grupo la tomaron después de ver actuar a The Clash en la universidad de Newcastle en 1977 durante el White Riot Tour. Tanto Mensi como Decca quedaron alucinados tras ver a los Clash en acción y creyeron que podían hacerlo mejor que los teloneros que tuvieron, The Slits y Subway Sect. Otros conciertos que le marcaron a fuego por la época fueron el de los Vibrators o el de los Stiff Little Fingers, ambos en Newcastle. Uno de los nombres que eligieron para la banda, Upstart, tiene un significado peyorativo (puede ser una persona trepa o alguien arrogante), por lo que decidieron colocar delante lo de “angelicales” para darle así un contrasentido irónico. Poco a poco se van labrando una reputación a fuerza de tocar para unos seguidores/as a los que Mensi describía como una mezcla entre hooligans y delincuentes. Lo cierto es que allá por donde el grupo pasaba, nadie quedaba indiferente y por supuesto, la prensa sensacionalista “ayudó” lo suyo a la hora de crearles mala fama. A pesar de las raíces totalmente “working class” de los Angelic Upstarts, el querer jugar a la tan común provocación punk de aquellos tiempos les jugó una mala pasada. En algunos conciertos los miembros del grupo salieron a tocar vistiendo parafernalia nazi. A su vez, Mensi también hizo alguna que otra declaración un tanto desafortunada, como cuando alabó la figura de un individuo como Enoch Powell. La suma de todo ello fue que algunos fachas empezaron a seguir a los Upstarts. Al principio Mensi no los rechazó del todo pensando que así los podría “reeducar”, pero pronto se arrepentiría y caería en la cuenta de su error. No solo no pudo “convencerles” sino que la violencia de extrema derecha en los conciertos de la banda fue in crescendo paulatinamente, lo que les reportó diferentes problemas añadidos: por una parte, comenzó a haber malestar entre los propios músicos de la banda, ya que mientras actuaban tenían que aguantar el mal ambiente continuo entre la audiencia, habiendo múltiples peleas y lanzamiento de todo tipo de objetos; por otra parte, los conciertos cancelados empezaban a ser cada vez más numerosos debido a que salas y promotores no querían saber nada de la banda; y para terminar, lo peor, la pasma comenzó a dejarse ver cada vez más en sus bolos, no solo para controlar al público sino también para vigilarlos a ellos mismos. Para mofarse de los ellos, los Angelic Upstarts empezaron a vestir uniformes de policía en sus actuaciones o incluso sacaron una cabeza de cerdo al escenario con el típico casco inglés de los policías británicos.
Hablando de la violencia, es ahora cuando toca el turno de hablar del que fuera infame mánager del grupo por un tiempo: Keith Bell. Conocido en la zona como “El sheriff”, este ex boxeador y gánster confeso se presentó un día a la banda con estas palabras: “soy un tipo duro y vosotros sois un grupo punk. Los grupos punks necesitan a tipos duros como yo para evitar que os molesten. Ahora yo soy vuestro mánager”. Así tal cual. Aunque los conciertos aumentaron para los Angelic Upstarts, paradójicamente las finanzas no pararon de bajar, ya que desde el primer día Bell les estuvo engañando y robando dinero. Esto creó muy mal rollo en el seno de la banda y propició a la larga la salida de alguno de sus componentes (Decca). A pesar de todo, la primera demo del grupo vería la luz por entonces con tres temas en su haber: “The murder of the Liddle Towers”, “Police oppression” y “Leave me alone”. Tras observar la buena recepción que tienen, Mensi y sus chicos deciden autoproducirse también el que sería su primer single, que fue llamado como la canción estrella del mismo: The murder of the Liddle Towers. El tema en cuestión contaba la historia de Liddle Tower, boxeador, portero y personaje de mala vida que una noche de enero de 1976 fue detenido por la policía y llevado a comisaría. No salió vivo. Liddle Tower moriría tras la paliza que recibió por parte de la pasma y ningún policía fue castigado por ello. El tema fue un rotundo éxito y las 500 copias del single se vendieron como rosquillas, logrando el número 1 de las listas alternativas del magazine Sounds y manteniéndose ahí por un año. Mensi había estado involucrado en su juventud en algunos casos de delincuencia, por lo que desde siempre la relación con la autoridad fue bastante tensa. Después de publicar The murder of the Liddle Towers, el acoso policial iría en aumento. Pero volviendo a la figura de su siniestro mánager, a éste no le gustó la idea de que Decca Wade quisiera echarlo y que después dejara el grupo. La primera acción del gánster Keith Bell fue propinar una monumental paliza al pobre Decca. Después, la tomó con sus familiares así como con los de Mensi también. El momento culminante de la disputa fue cuando el padre de Decca y el cuñado de Mensi, junto a tres colegas más, hartos de las amenazas y agresiones de Bell y sus secuaces, fueron en su busca armados con una escopeta de cañones recortados. Hubo dos disparos que fueron a parar uno a la pared y el otro a la pierna de uno de los matones de Bell. El incidente se inmortalizó en la canción “Shotgun solution” perteneciente al álbum de We gotta get out of this place del año 1980. A partir de esta movida la policía intervino y comenzaron las detenciones y los juicios. El cuñado de Mensi y el colega que disparó fueron encarcelados. El padre de Decca lo condenaron a dos años de cárcel pero al concederle la libertad provisional, finalmente no acabó entrando. Se dio la casualidad de que el mismo juez que dictó su sentencia fue el mismo que se ocupó del caso de Liddle Towers… Por su parte, el ya ex mánager Keith Bell fue condenado a un total de 6 años de cárcel (se le juntó todo: palizas, drogas, incendios, amenazas…), y de nuevo la casualidad hizo que el matón fuera a cumplir la pena a la prisión de Acklington, la misma donde en el 79 los Angelic Upstarts tocaron frente a unos 150 convictos y donde la liaron a base de bien colocando una pancarta en el escenario que rezaba: “Smash law and order” (destruye la ley y el orden).
Retomando la historia meramente musical de los Upstarts, decir que Decca fue sustituido por Keith “Sticks” Warrington. Una copia del single llegó a las manos de Jimmy Pursey (Sham 69), quien entusiasmado con la música de la banda hizo de puente entre los Upstarts y la compañía Polydor además de producirlos. Cuando el grupo pensaba que lo que estaban grabando iban a ser simplemente unas maquetas, Pursey les sorprendió al decirles que el disco ya estaba terminado. Sin embargo, debido a otro “famoso” incidente entre Mensi y el jefe de seguridad de la compañía (Mensi le ostió en una pelea provocada tras la discusión acerca de un bolazo de nieve que pasó rozando al machaca y a unas amigas suyas), los Angelic Upstarts fueron despedidos de Polydor, eso sí, con veinticinco mil libras en el bolsillo y el LP terminado sin abonar nada, pues Jimmy Pursey se las ingenió para birlar las llaves del estudio de Polydor y terminar así las mezclas… Al siguiente día, la banda firmó con Warner y volvió a recibir por adelantado la nada despreciable cifra de treinta mil libras. El importante contrato con la Warner, sumado a los problemas con el gánster mafioso, harán que los Upstarts se instalen en Londres y que empiecen una aventura con un nuevo mánager, Tony Gordon, menos violento quizá que Keith Bell, pero igual de ladrón. Teenage warning fue publicado en 1979 y llegó al puesto 29 de las listas de música del Reino Unido, así como también lo hicieron los singles I’m an Upstart y Teenage warning. Con el éxito les llega la ocasión de salir en la televisión en el programa Top of the Pops (una especie de Tocata a la inglesa donde aparecían los grupos que llegaban al “chart”). Anteriormente ya habían realizado también una de las clásicas John Peel Sessions.
Hablando de la violencia, es ahora cuando toca el turno de hablar del que fuera infame mánager del grupo por un tiempo: Keith Bell. Conocido en la zona como “El sheriff”, este ex boxeador y gánster confeso se presentó un día a la banda con estas palabras: “soy un tipo duro y vosotros sois un grupo punk. Los grupos punks necesitan a tipos duros como yo para evitar que os molesten. Ahora yo soy vuestro mánager”. Así tal cual. Aunque los conciertos aumentaron para los Angelic Upstarts, paradójicamente las finanzas no pararon de bajar, ya que desde el primer día Bell les estuvo engañando y robando dinero. Esto creó muy mal rollo en el seno de la banda y propició a la larga la salida de alguno de sus componentes (Decca). A pesar de todo, la primera demo del grupo vería la luz por entonces con tres temas en su haber: “The murder of the Liddle Towers”, “Police oppression” y “Leave me alone”. Tras observar la buena recepción que tienen, Mensi y sus chicos deciden autoproducirse también el que sería su primer single, que fue llamado como la canción estrella del mismo: The murder of the Liddle Towers. El tema en cuestión contaba la historia de Liddle Tower, boxeador, portero y personaje de mala vida que una noche de enero de 1976 fue detenido por la policía y llevado a comisaría. No salió vivo. Liddle Tower moriría tras la paliza que recibió por parte de la pasma y ningún policía fue castigado por ello. El tema fue un rotundo éxito y las 500 copias del single se vendieron como rosquillas, logrando el número 1 de las listas alternativas del magazine Sounds y manteniéndose ahí por un año. Mensi había estado involucrado en su juventud en algunos casos de delincuencia, por lo que desde siempre la relación con la autoridad fue bastante tensa. Después de publicar The murder of the Liddle Towers, el acoso policial iría en aumento. Pero volviendo a la figura de su siniestro mánager, a éste no le gustó la idea de que Decca Wade quisiera echarlo y que después dejara el grupo. La primera acción del gánster Keith Bell fue propinar una monumental paliza al pobre Decca. Después, la tomó con sus familiares así como con los de Mensi también. El momento culminante de la disputa fue cuando el padre de Decca y el cuñado de Mensi, junto a tres colegas más, hartos de las amenazas y agresiones de Bell y sus secuaces, fueron en su busca armados con una escopeta de cañones recortados. Hubo dos disparos que fueron a parar uno a la pared y el otro a la pierna de uno de los matones de Bell. El incidente se inmortalizó en la canción “Shotgun solution” perteneciente al álbum de We gotta get out of this place del año 1980. A partir de esta movida la policía intervino y comenzaron las detenciones y los juicios. El cuñado de Mensi y el colega que disparó fueron encarcelados. El padre de Decca lo condenaron a dos años de cárcel pero al concederle la libertad provisional, finalmente no acabó entrando. Se dio la casualidad de que el mismo juez que dictó su sentencia fue el mismo que se ocupó del caso de Liddle Towers… Por su parte, el ya ex mánager Keith Bell fue condenado a un total de 6 años de cárcel (se le juntó todo: palizas, drogas, incendios, amenazas…), y de nuevo la casualidad hizo que el matón fuera a cumplir la pena a la prisión de Acklington, la misma donde en el 79 los Angelic Upstarts tocaron frente a unos 150 convictos y donde la liaron a base de bien colocando una pancarta en el escenario que rezaba: “Smash law and order” (destruye la ley y el orden).
Keith Bell en pie detrás del grupo |
Liddle Towers |
Retomando la historia meramente musical de los Upstarts, decir que Decca fue sustituido por Keith “Sticks” Warrington. Una copia del single llegó a las manos de Jimmy Pursey (Sham 69), quien entusiasmado con la música de la banda hizo de puente entre los Upstarts y la compañía Polydor además de producirlos. Cuando el grupo pensaba que lo que estaban grabando iban a ser simplemente unas maquetas, Pursey les sorprendió al decirles que el disco ya estaba terminado. Sin embargo, debido a otro “famoso” incidente entre Mensi y el jefe de seguridad de la compañía (Mensi le ostió en una pelea provocada tras la discusión acerca de un bolazo de nieve que pasó rozando al machaca y a unas amigas suyas), los Angelic Upstarts fueron despedidos de Polydor, eso sí, con veinticinco mil libras en el bolsillo y el LP terminado sin abonar nada, pues Jimmy Pursey se las ingenió para birlar las llaves del estudio de Polydor y terminar así las mezclas… Al siguiente día, la banda firmó con Warner y volvió a recibir por adelantado la nada despreciable cifra de treinta mil libras. El importante contrato con la Warner, sumado a los problemas con el gánster mafioso, harán que los Upstarts se instalen en Londres y que empiecen una aventura con un nuevo mánager, Tony Gordon, menos violento quizá que Keith Bell, pero igual de ladrón. Teenage warning fue publicado en 1979 y llegó al puesto 29 de las listas de música del Reino Unido, así como también lo hicieron los singles I’m an Upstart y Teenage warning. Con el éxito les llega la ocasión de salir en la televisión en el programa Top of the Pops (una especie de Tocata a la inglesa donde aparecían los grupos que llegaban al “chart”). Anteriormente ya habían realizado también una de las clásicas John Peel Sessions.
En el estudio con Jimmy Pursey |
En 1980 saldría el segundo LP de los Angelic Upstarts, el We gotta get out of this place. En esta época Glyn Warren entraría como bajista tras dejar Forsten la banda por amor (otro bajista llamado Ronnie Wooden pasaría por el grupo anteriormente aunque duraría un suspiro). El disco mantuvo el nivel pero tuvo menos impacto en las listas que el Teenage warning, por lo que Warner les dio la patada y los Upstarts fueron a parar a EMI. Aunque Jimmy Pursey seguía colaborando con la banda, la relación con él no estaba en sus mejores momentos. Por entonces Pursey se encontraba colaborando con dos ex Sex Pistols, Steve Jones y Paul Cook, dentro del proyecto que se llegó a denominar The Sham Pistols. Mensi se quedó perplejo cuando Pursey le ofreció su puesto de vocalista en los Sham 69, cosa que rechazó. Lo siguiente que grabarían los Upstarts fue el single de Last night another soldier. Tras la salida de dicho sencillo el batería Sticks Warrington abandonaría el grupo para recalar en los Cockney Rejects. Según Sticks, el motivo de su marcha fue que el grupo vendió sin consultarle su kit de batería por 20 libras, aunque Mensi manifestó que la vendieron porque descubrieron, tras leer su diario personal, que Sticks tenía pensado venderla de todas formas para ayudar económicamente a una novia que tenía por entonces. El ex Roxy Music Paul Thompson se ocuparía de las baquetas en los singles que vendrían, el de England y el de Kids on the streets. Con el tema “England” Mensi quiso disociar el patriotismo de la extrema derecha, aunque no solo no lo logró sino que atrajo a más derechistas y nazis a la órbita del grupo. Los Angelic Upstarts continuaban teniendo problemas con ellos en sus conciertos, y estos fueron en aumento cuando la banda empezó a estar asociada al movimiento Oi debido a que el periodista y músico Garry Bushell metió las canciones “Last night another soldier” y “Guns for the Agfhan rebels” en el famoso recopilatorio Oi! The Album. El movimiento Oi viró rápidamente a la derecha durante los años 80, por lo que la opinión de Mensi respecto a él no es nada positiva: “Estoy en un grupo punk. Siempre he estado en una banda de punk. El punk era subversivo, sin miedo alguno a denunciar las injusticias independientemente de tu color, credo o religión. En mi opinión, el movimiento Oi es de derechas y blanco. Cuando hablas con alguno de ellos, son como la personificación de los hijos de (Margaret) Tatcher”.
Con 2.000.000 voices y el álbum Live, ambos editados en 1981 por EMI, los Angelic Upstarts tocaron techo a nivel de popularidad. Decca Wade volvió a ocuparse de las baquetas y ambos trabajos lograron alcanzar las listas de éxitos (puesto 32 para el disco de estudio y 27 para el directo). Pero tras tocar la cima los Upstarts se hundieron con la preparación del siguiente LP que editarían en 1982. Con Tony Feedback (ex Long Tall Shortly) ocupándose del bajo ahora (Glyn arrastraba problemas auditivos y lo acabó dejando), el grupo sucumbió a las presiones de la discográfica que les “sugirió” un cambio de rumbo estilístico en pro de obtener un mayor resultado comercial. Los Upstarts abrieron esta nueva etapa con el single en clave reggae Different strokes, para continuar con el disco Still from the heart, un trabajo que aun contando con algún que otro tema aceptable y manteniendo unas letras con mensaje, fue un rotundo fracaso debido sobre todo a la floja producción. Además, tampoco obtuvo la recepción comercial que la compañía andaba buscando, por lo que acto seguido la banda fueron despedidos de EMI. Los Upstarts se desquitaron ese mismo año con la edición del single con el tema anti-Tatcher “Woman in disguise”.
Fue en 1982 también cuando los Angelic Upstarts girarían por primera vez por los Estados Unidos. Entre otras, alguna de las bandas con las que Mensi y sus muchachos compartieron escenarios fueron los Social Distortion, Youth Brigade, Bad Religion, TSOL o Iron Cross. Con estos últimos tuvieron sus más y sus menos tras expulsarlos de los camerinos. Iron Cross los acusarían después en algunas entrevistas de “ir de estrellas”. Otro dato curioso del tour es que, como ya les pasó a los Stiff Little Fingers, los Upstarts se quedaron perplejos al descubrir las nuevas tendencias que en el baile se daban por entonces dentro de la escena hard core-punk americana. Tony Feedback, acerca de la modalidad de subirse al escenario para después tirarse, diría lo siguiente: “jodidos idiotas. Nunca antes había visto esto hasta el día en que tocamos con Black Flag en Mount Vernom. Se subían por los lados del escenario, corrían por él y nos fastidiaban porque no sabíamos dónde ponernos”. Por cierto, tampoco los Black Flag acabaron de congeniar con ellos en un primer momento porque otra vez decían que iban de estrellas, así lo explican en el libro Left of the Dial. Conversations with Punk Icons (David Ensminger), aunque como también señalan, al cabo de unos años se reencontrarían con ellos de nuevo y todo iría bien. Aún hay más anécdotas del paso de los Angelic Upstarts por los USA y algunas de ellas están recogidas en diferentes obras. Por ejemplo, En la biografía no autorizada del cantante de los Guns and Roses, Axl Rose, que está escrita por Mick Wall, se puede leer el siguiente párrafo acerca de Duff Mckagan, uno de los baterías que pasó por los GnR: “En ese momento él estuvo a punto de ser el batería de los punks de la Segunda Ola Angelic Upstarts. -El grupo vino a Seattle años atrás y estuvieron alojados en la casa de un colega, por lo que yo los conocí ahí. Un día por sorpresa me llamaron desde San Francisco, me comentaron que estaban buscando un batería y me preguntaban que si yo estaba interesado-. A lo más que llegó Duff fue a ensayar con ellos, pero se echó para atrás cuando le dijeron que si quería continuar en la banda se tendría que ir a vivir a Inglaterra. -Tenía miedo de dar ese salto, por lo que los dejé y volví con el grupo que por entonces estaba-.” Otra curiosa anécdota se puede leer también en el libro Psychic confusión-The Sonic Youth History, escrito por Stevie Chick y en donde se nos explica la historia de este grupo de noise rock de Nueva York. En dicha obra aparece el siguiente comentario de uno de los miembros de la banda: “Recuerdo que tocamos con los Angelic Upstarts allá en el año 82. Versionamos de manera horrible el “Can you hear me knocking” de los (Rolling) Stones. Nos salió como una mierda, me imagino que nos habíamos metido alguna droga dura o algo antes. El tío de los Angelic Upstarts se acercó al escenario y nos abroncó diciendo –¡No más Rolling Stones, estamos en el 82!- Uff, jodidamente de acuerdo, ¡1982!”. Su paso ese mismo año por el Canadá, más concretamente por Montreal, también sería recordado por una monumental bronca que se formó entre la banda y parte del público que no paró de lapearlos e insultarlos todo el rato. Los Upstarts tuvieron sus encontronazos primero, pero todo terminó estallando cuando tocaban The Professionals (grupo con los ex Sex Pistols Steve Jones y Paul Cook en sus filas) y sufrieron el mismo trato por parte de los rednecks de turno. Ambos grupos se dieron de ostias con dichos garrulos y la policía tuvo que acabar interviniendo hasta en dos ocasiones, ya que tan pronto como se calmaba la cosa empezaba de nuevo, tanto fuera como dentro de la sala…
Ya en 1983 el grupo editaría Reason why?, un trabajo más que decente mientras que Decca lo dejaría otra vez, debido primero al uso y abuso tanto del alcohol como de las drogas, y después, porque tampoco pillaba apenas pasta de los royalties al no aparecer su firma en las composiciones. En su lugar entraría de nuevo Paul Thompson. A su vez, una segunda guitarra se añadió a la formación (Bryan Hayes). Por encima de todas las canciones de ese álbum, destacaba el himno de “Solidarity”, la cual salió por separado ese mismo año en formato Single. Tras estos trabajos el guitarrista Mond decidió dejar la banda para unirse a los New Model Army. El guitarrista original de los Upstarts decidió abandonar harto también de no ver un duro y era bien cierto, pues los miembros de la banda recibían apenas 25 libras semanales (menos que en el paro, que eran 27) y hasta el propio Mensi se tuvo que buscar un curro temporal de taxista para ir tirando. En 1984 estallan las huelgas mineras por todo el Reino Unido. En la localidad de Orgreave (South Yorkshire), se produce una fuerte represión tras los durísimos enfrentamientos entre los mineros y la policía. Los hechos acaecidos allí se conocen como La batalla de Orgreave. Este episodio reafirmaría a Mensi y por ende, a los Angelic Upstarts, en su compromiso político. Mensi manifestó en una entrevista lo siguiente: “Siempre fuimos clasificados como una banda comunista, pero yo era simplemente sindicalista. No creo que hoy en día sea más político que cuando empecé. Creo que todo ha virado a la derecha mientras que mi postura es la misma. El punto de inflexión fue la huelga minera. Estaba en un pub, había una gran pantalla de televisión y cuando la policía cargó contra los mineros hubo un gran jolgorio. Todos se alegraron menos dos o tres tipos y yo pensé: sois todos unos mierdas y unos desgraciados! Estaban sentados ahí diciendo que eran apolíticos y después se regocijaban de eso… Les dije: sois unos mierdas, los mineros son mis amigos. Desde ese día empecé a ser más político, aunque yo he sido más sindicalista que otra cosa”.
Durante lo que quedaba de década, los Angelic Upstarts editarían tres discos más teniendo constantes cambios en su formación. Last tango in Moscow salió en 1984, Power of the press lo hizo en 1986 y Blood on the terraces, en 1987. Todos ellos serían editados a su vez por compañías independientes y todos ellos tendrían desigual recepción. Los Upstarts nunca volverían a alcanzar el nivel del 2.000.000 voices aun encontrando como siempre algunas buenas canciones en todos sus trabajos. La polémica por eso nunca les abandonó y un ejemplo de ello sería el LP Power of the press y el tema “Brighton bomb”. Esta canción causaría no poca controversia al lamentar públicamente que el IRA provisional fallara en cargarse a la Tatcher cuando atentó contra la conferencia del partido conservador inglés en 1984, acción en la que murieron 5 tories. También, con el disco Blood on the terraces (sangre en las gradas) fueron acusados de fomentar la violencia futbolera, ya que la tragedia de Heysel había ocurrido ese mismo año. Como decíamos, en estos tiempos la formación cambiaba constantemente, manteniéndose únicamente como “fijos” Mensi y Hayes, más un sinfín de músicos que pasaban, algunos de los cuales provenían de bandas de colegas, como por ejemplo los Splodgenessabounds (Max Splodge llegó a ocuparse según la demanda, tanto del bajo como de la batería). Tras unos años parados, el grupo reaparecería en 1992 con el disco Bombed out y con Mond de nuevo en la formación. Bastante decente el álbum pero con los mismos resultados desiguales que los anteriores trabajos de la banda.
Mensi y Max Splodge |
Durante lo que quedaba de década, los Angelic Upstarts editarían tres discos más teniendo constantes cambios en su formación. Last tango in Moscow salió en 1984, Power of the press lo hizo en 1986 y Blood on the terraces, en 1987. Todos ellos serían editados a su vez por compañías independientes y todos ellos tendrían desigual recepción. Los Upstarts nunca volverían a alcanzar el nivel del 2.000.000 voices aun encontrando como siempre algunas buenas canciones en todos sus trabajos. La polémica por eso nunca les abandonó y un ejemplo de ello sería el LP Power of the press y el tema “Brighton bomb”. Esta canción causaría no poca controversia al lamentar públicamente que el IRA provisional fallara en cargarse a la Tatcher cuando atentó contra la conferencia del partido conservador inglés en 1984, acción en la que murieron 5 tories. También, con el disco Blood on the terraces (sangre en las gradas) fueron acusados de fomentar la violencia futbolera, ya que la tragedia de Heysel había ocurrido ese mismo año. Como decíamos, en estos tiempos la formación cambiaba constantemente, manteniéndose únicamente como “fijos” Mensi y Hayes, más un sinfín de músicos que pasaban, algunos de los cuales provenían de bandas de colegas, como por ejemplo los Splodgenessabounds (Max Splodge llegó a ocuparse según la demanda, tanto del bajo como de la batería). Tras unos años parados, el grupo reaparecería en 1992 con el disco Bombed out y con Mond de nuevo en la formación. Bastante decente el álbum pero con los mismos resultados desiguales que los anteriores trabajos de la banda.
Continuará...
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