Crónica Bad Manners (6-12-2016)

Bad Manners- Max Splodge. The Live Rooms (Chester). £15

Buena oportunidad de reencontrarme otra vez con los Bad Manners tras 19 años desde la primera vez que los vi en el ex pabellón del Juventut de Badalona, en un festi en el que actuaron también los Komando Moriles, Skaparàpid y unos tal Ska-p que por la fecha, se encontraban en plano “boom comercial” con su “afamado” disco El vals del obrero… 

Lluvia para variar y caos en el transporte para variar, por lo que llegué tarde, justo en la recta final del concierto de Max Splodge. Así, únicamente pude presenciar los dos últimos temas que se tocaron, el “Hurry Up Harry” de los Sham 69, y el archiconocido “Two Pints of Lager and a Packet of Crisps”, canción que encumbró en la fama a Mr. Max y sus Splodgenessabounds.

 

Me sorprendió mucho ver que los músicos que acompañaban a Max Splodge se largaron del escenario dejando sus instrumentos intactos encima de él. Al principio pensé que ambas bandas compartían equipo y que por tal motivo el cambio de grupo sería rápido, cosa que me alegró. Pero no, el motivo real fue que Buster Bloodvessel y Max Splodge compartían los músicos a excepción del saxo y del trompeta. Me imagino que el batería acabará hecho polvo tras cada doblete…

Sabía que el cantante de los Bad Manners había perdido bastante peso tras una operación en la que se quitó del tirón casi 20 quilos. Pese a ello, el público no tuvo ninguna piedad con él y durante toda la actuación, en las pausas entre temas, no pararon de corearle el clásico ese de “You Fat Bastard”. Lo que no ha perdido Buster Bloodvessel es centímetro alguno de su pedazo de lengua, la cual sacaba a menudo. Madre mía, había visto fotos, pero verla ahí in situ a dos metros de mí me dejó flipado. Si no cantara, pienso que se podría ganar la vida tranquilamente y muy bien realizando cunilingus o felaciones según su gusto…

Hubo una más que aceptable entrada teniendo en cuenta que el bolo cayó en martes. Calculo que habrían alrededor de 400 o 500 personas, lo que hizo que nunca faltara ambiente y bailoteo, pero sin agobios y pudiéndote mover fácilmente de la pista de baile a la barra o al lavabo. Hubo mucha presencia de skins veteranos y reseñar únicamente una incidencia, y es que un tipo fue expulsado por lo pasado que iba y por no parar de dar la brasa a l@s que bailaban por las primeras filas. 

Yendo al concierto de los Bad Manners, Buster Bloodvessel y sus chicos se curraron una actuación exquisita en la que cayeron todos sus clásicos. Hacía siglos que no me los ponía en casa pero sin problema, ya que el repertorio que se hicieron esa noche fue casi como escuchar un recopilatorio de grandes éxitos de la banda. “This is Ska” dio el pistoletazo de salida y tras ella, fue un no cesar de hits suyos o versiones como “My Girl Lollilop”, “Sally Brown”, “Inner London Violence”, “Special Brew”, “Skinhead Girl”, “Can’t Take My Eyes Off You” (Matt Monro), etc, etc, con mención especial para quizá mi favorita de ellos, la de “Just A Feeling”. 

A ritmo si mal no recuerdo de la de “Lorraine” terminó la primera parte del show. Era la hora de esperar al bis que vendría seguramente con el “Lip Up Fatty” y el “Can Can”. Digo seguramente porque tristemente me lo perdí. Dependía del “fecking” transporte para volver a casa y no podía perder el tren de las 11, porque quedarse tirado en Uk con el clima que hace un martes y teniendo que currar al día siguiente, es calarte hasta los huesos y morir congelado. Así que por ir de Ceniciento me tuve que ir por patas a la renfe de Chester y perderme el fin de fiesta. Aun esto, formidable concierto de los Bad Manners y un gustazo reencontrarme con ellos en su gira del 40 aniversario. Sí, señor, This is Ska!